Soledad…
palabra triste y femenina, gris y dulce,
de miedo y paz, destructora y
constructora, singular e infinita…
Soledad
es ese estado donde escuchamos el sonido de nuestros latidos, donde somos
espectadores de la quietud de una habitación. Soledad es un pasaje para
estudiar las luces y las sombras de un lugar, o de todos los lugares.
Es un
estado de gracia, dentro de la desgracia.
Soledad
es cocinar para uno, es caminar de noche por la ciudad,
es ver otras soledades
en la calle.
Soledad es rezar, masturbarse, tomar mucho café, y empezar a leer
libros de
autoayuda aunque posiblemente nunca los termines.
Soledad
es viajar por tierra o por imaginación, es visitar otros lugares a donde
vas
para estar solo. Soledad es hacer turismo interno y empezar a conocer esa
otra
persona que eres tu mismo.
Soledad
es ver películas y llorar, es ver como otros que se aman no estén juntos y
llorar. Soledad es amar y llorar, es también no poder sentir amor y llorar.
Soledad
es saber que no estarás con nadie solo por no estar solo,
pero también es estar
solo estando con alguien para no estar solo.
Soledad es una buena compañía.
Soledad
es un triunfo personal después de una derrota grupal,
es una pasantía de
prescripción médica en algunos casos.
Es un tips de Cosmopolitan cuando algo
termina mal y es un marco perfecto de
glamour y misterio cuando conoces a
alguien que te cautiva.
Soledad
es rating seguro en los canales de TV por Cable,
es un internauta más en
Internet, es un oyente participativo de programas radiales,
o al menos es
radio-escucha consecuente.
Soledad
es el futuro padre o madre de una mascota.
Soledad es buena con las plantas.
Soledad
es el inicio de una vida de hacer lo que nos gusta.
Soledad es no tolerar más
algo.
Soledad es la musa del trabajo creativo.
Soledad es dj.
Soledad
es desnudar la margarita,
¿me quiere? ¿no me quiere? ¿quiero? ¿no quiero?.
Soledad es saber cuando llegas a buen puerto.
04|09|2011
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